Sumamente cara y excluyente la Feria de Puebla
- Inicia con normativa «estricta» y hasta violatoria por parte de los uniformados encargados de la seguridad en el recinto
05 de Mayo 2014 / Puebla, Pue. (Sergio Espinoza)
Este fin de semana dio inicio una de las ferias más importantes en la República Mexicana, la Feria de Puebla en su edición 2014, la cual se caracteriza por sus costos altos, marcadas incongruencias y las actitudes violatorias a los derechos de cada ciudadano por parte de los elementos de seguridad.
Mediante un recorrido realizado por quien escribe las presentes líneas, se pudo constatar la serie de absurdos que se pueden observar y padecer al asistir al recinto ferial ubicado en los fuertes en la zona oriente de la ciudad, el que este año tiene como país invitado a Alemania, con su música, gastronomía, bailes e historia características específicas del pueblo teutón.
Donde para ingresar es necesario cubrir 20 pesos por persona y 10 pesos por los niños menores a 1.20 metro de estatura, después de ello, en los filtros integrados por jóvenes y uniformados de la Secretaria de Seguridad Pública Poblana, se obliga a los visitantes a una revisión a las bolsas y mochilas que lleven, con el pretexto de supuestamente evitar el ingreso de armas y artículos prohibidos.
Ya en el interior, los visitantes se encuentran con otro absurdo que incómoda a los visitantes del Planetario, el Museo Imagina, el Museo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y el Museo de Historia Natural, los que se ven rodeados por centros botaneros, cantinillas, bares y expendios de micheladas.
Lo que obliga a quien tienen interés de tipo cultural, a padecer el fuerte ruido de la música de los expendios de bebidas embriagantes y el ambiente no grato de los visitantes a estos lugares.
Durante el recorrido es de señalar que los organizadores permiten la convergencia en el lugar de distintos expositores de variados países, con prendas de vestir y comida y recuerdos que sólo se pueden adquirir si se va de viaje a esos lugares, los que asombran a los turistas por sus precios y hasta pensarlo dos veces para adquirir algún artículo.
Sumado a esto está el tema del transporte, el que se sabe es gratuito para quien desee asistir al recinto, sólo que existe un inconveniente, que no se explica al visitante a esa feria, el lugar ni los horarios de salida.
En este sentido, algunos transportistas al ser cuestionados del porque no están laborando de manera normal, reprocharon el que la autoridad haya determinado el que no se pueda acceder como comúnmente se hacía, incluidos los taxis, donde sólo los autorizados pueden trabajar.
Lo cual este fin de semana obligó a que algunos de los asistentes tuviesen que desplazarse a pie, ida y vuelta a los fuertes, debido a que como estaba el ensayo general para el desfile, no se podía acceder a las calles aledañas, para por lo menos estacionarse, donde la ausencia de los uniformados que dieran instrucciones para evitar cualquier violación a legalmente de tránsito dificultó aún más la visita al lugar.
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